Comidas, horarios, trabajo, ejercicio físico… Nada debería cambiar aunque nos toque permanecer recluidos en casa. Para reforzar nuestro sistema inmunológico será necesario, en la medida de lo posible, continuar con nuestras rutinas y hábitos de alimentación y actividad física. Te damos algunos consejos básicos para no abandonarnos durante la cuarentena.
Sigue tu rutina de horarios
Intenta no cambiar, o cambiar lo menos posible, tus horarios habituales: hora de despertarte, de irte a la cama, comidas…
Nuestro reloj biológico está regido por los horarios de sueño-vigilia y de ingesta alimentaria. Si los modificamos se pueden producir cambios del metabolismo, del cerebro y otros órganos, que bajarán nuestras defensas.
Es recomendable también que continúes con tus rutinas de aseo y no te quedes en pijama todo el día.
Seguir un patrón de horarios hará que te sientas ocupado y que pienses menos en que no puedes ir a tu roco favorito.
Trabajo desde casa
Si haces teletrabajo, intenta que sea en el mismo horario que tenías cuando ibas a la oficina (el tiempo que tardabas en desplazarte hasta la oficina lo puedes disfrutar durmiendo… ¡Premio!).
Busca un sitio en casa en el que trabajar cómodamente –no valen ni la cama ni el sofá– con unas buenas condiciones (una buena silla y mesa donde trabajar y que entre suficiente luz natural como para prescindir de las bombillas).
Acuérdate de mantener una postura adecuada: mantente erguido en la silla y coloca la pantalla a la altura de tus ojos.
Realiza descansos de manera habitual. Levántate de la silla, da un paseo por la casa, haz unos estiramientos, bebe agua…
Aliméntate ‘como Dios manda’
Ahora más que nunca se hace necesario no descuidar los hábitos alimentarios. Recuerda hacer tus tres comidas al día, o las que estés acostumbrado a hacer, y procura comer de todo (carne, pescado, fruta, verdura…).
Evita picotear entre horas. Si antes no te comías una bolsa de patatas a media tarde, ahora menos.
Mantener una dieta sana y equilibrada es clave para mantener nuestro sistema inmune alerta y, por tanto, muy importante para protegernos del dichoso bichito…
Ejercicio diario
Si eres una persona acostumbrada a hacer ejercicio, no deberías parar.
Antes, el simple hecho de salir de casa para ir al trabajo o para ir a comprar ya implicaba hacer algo de actividad física, así que si no sueles hacer actividad física de manera habitual esto también es para ti.
Se pueden hacer muchos ejercicios sin que sean tan aburridos como simplemente caminar por casa. Rebe, Ekhi y Jorge te dan algunas ideas cada semana en el Entrenamiento Online. No hay excusa que valga.
Recuerda que los periodos de inmovilización producen pérdida de fuerza y resistencia muscular, rigidez articular, problemas circulatorios… Además, el ejercicio físico te ayudará a mantener el estado de ánimo ya que libera endorfinas…
Sí, vale, el chocolate también libera endorfinas, pero hay que comerlo con moderación…
Por Rubén Martínez
Fisioterapeuta en SputnikSalud
