Aprovechemos que no hay prisas y que tenemos tiempo para compartir con los más peques de la casa. Aquí os dejamos algunas ideas divertidas para hacer juntos estos días. ¡Vamos a liarla parda y a disfrutar como enanos en familia!
Que no se nos olvide que tener tiempo libre es muy importante para la infancia. Los niños y las niñas necesitan tiempo para jugar sin la intervención de los adultos ¡y para aburrirse! ¡De los grandes aburrimientos nacen las grandes ideas! Aun así, las 24 horas de un día dan para mucho, así que os proponemos unas cuantas actividades y juegos para disfrutar en familia.
La lógica te llevará del punto A al punto B, pero la imaginación te llevará a todos lados.
Albert Einstein
Si nos apetece mover el cuerpo
- ¿Qué hay más divertido que un partido de voleybol con un globo usando el sofá como red?
- Podemos echarnos unos bailes en familia. Aconsejamos elegir un disfraz hecho con pañuelos, botas, gafas… lo que encontremos por el armario. ¡La imaginación no tiene límites!
- Con círculos de colores hechos de papel y pegados en el suelo y un par de dados de cartulina, construiremos un twister gigante para toda la familia.
- En el suelo de la terraza o del salón podemos improvisar (con cinta aislante, cinta de carrocero…) una rayuela o un circuito para jugar a las chapas .
- Vamos a convertir el salón, con hilo o lana, en el escenario de Misión Imposible. Después de tejer una enorme tela de araña, el reto consistirá en atravesarla sin tocar ningún hilo (si tenemos algún cascabel, puede resultar más emocionante aún).
- Otra idea muy divertida es investigar por la casa y elegir objetos que se puedan usar como instrumentos (cacerolas, cucharas, cajas…) y montar un concierto increíble (aviso: no sabemos qué van a decir los vecinos de esto).
- También podemos dibujar y pintar siluetas de manos y pies, recortarlas y hacer un gran circuito por el pasillo (no vale tocar el suelo) incluyendo todo tipo de obstáculos: mesas, sillas, zapatillas, cajas… Se puede ir complicando hasta poner al límite el equilibrio del mejor escalador.
Busquemos algo más tranquilo
- ¡Cocinar en familia! Pelar, lavar, cortar las verduras y demás ingredientes, además de ser una actividad divertida, ayuda a los peques y no tan peques a formar parte de un hábito saludable, el de una buena alimentación. Por no hablar de lo divertido que es hacer pan, masa de pizza o galletas. Por cierto, ¿habéis pintado con chocolate alguna vez?
- Y si antes hablábamos de hacer un concierto, ahora os proponemos algo más tranquilo (por si los vecinos son tiquismiquis): vamos a “pintar música”. Podemos hacerlo de manera individual o toda la familia junta en un mismo papel grande (nos puede servir un mantel desechable o un trozo de papel de regalo usado). Cada uno elige una canción y ¡a pintar lo que la música que suene nos inspire! No hay ninguna pauta, valen todos los colores, formas y trazos que se nos ocurran.
Ahora toca reciclar
- Convertiremos botellas de plástico vacías en bonitos maceteros para nuestra terraza o jardín.
- Podemos investigar sobre las plantas que tenemos en casa y hacer cartelitos con sus nombres para colocarlos en las macetas.
- Y, por supuesto ¡la manualidad por excelencia!, hacer un diorama con todos los materiales que encontremos por casa. Podemos crear desde una casa de muñecas hasta un rocódromo, pasando por un bosque o lo que queramos, usando tapones, cajas, telas, bricks, bolsas, lanas, botones, un poco de pintura, pegamento y ¡mucha imaginación! Lo más importante es dejar volar las inquietudes, los sueños… Imaginad que sois una tribu, podéis inventaros el atuendo, construir vuestro campamento con sábanas, mantas y toallas bajo una mesa (¡qué recuerdos!), decidir sobre las costumbres gastronómicas de la tribu, canciones para rituales, idioma… O construir vuestro tótem único e irrepetible que represente vuestra tribu.
Por Ana Richart
Crecer Escalando
Me encanta saber de vosotros, Ana. Gracias por las ideas! Son muy interesantes 😀
Holaa nosotros tb os echamos de menos!!
Muchas gracias x la idea, ánimo y esperamos veros pronto. Un enorme abrazo virtual