Si por fin te has decidido a probar ese deporte del que todo el mundo habla, estás de enhorabuena, ya tienes lo más importante: la motivación. Ya sea para experimentar algo nuevo, para ponerte en forma o para darle un upgrade a tu perfil de Tinder, lo fundamental para empezar es dar el primer paso. Si estás en Madrid, tienes una gran variedad de rocódromos para iniciarte, muchos de ellos con zonas específicas para principiantes y cursos de iniciación. Aquí te vamos a contar cómo afrontar tu primera vez en un rocódromo, qué material necesitas y todo lo que has de saber tanto si quieres ir por tu cuenta como si optas por hacer un curso de escalada que te ayude a comenzar con buen pie.
¿Qué hace falta para entrar en un rocódromo?
Para acceder a un rocódromo no hace falta ningún carnet federativo ni certificado especial. Cualquiera –que tenga ganas, ya sabes– puede entrar. En el caso de los menores, deben ir acompañados por un adulto, aunque en muchos rocódromos de Madrid (como en los de Sputnik), si tienes entre 15 y 18 años, basta con llevar una autorización.
Nada más llegar, encontrarás una recepción donde podrás alquilar el material necesario y recibir las indicaciones básicas. No temas preguntar cualquier duda a los monitores; estarán encantados de ayudarte.
Si nunca has escalado antes, es normal sentir un poco de incertidumbre al entrar en un rocódromo por primera vez. Pero no te preocupes, una vez que des el primer paso, verás que todo es más fácil de lo que imaginabas.
Piensa en usar ropa cómoda, que te permita moverte libremente, y mejor si llevas las uñas cortas, para poder agarrarte a las presas sin temor a que se te rompan. Los rocódromos suelen contar con una zona de vestuarios y taquillas en la que podrás cambiarte o incluso ducharte al acabar la sesión.
¿Qué material necesito para escalar por primera vez en un rocódromo?
Habitualmente en los rocódromos puedes practicar dos tipos de escalada: en boulder y en vías con cuerda.
- Para el boulder (o búlder), que se realiza cerca del suelo, lo único que necesitas son unos pies de gato, que son unas zapatillas diseñadas para adherirte mejor a las presas de escalada.
- Si te animas a probar con las vías, necesitarás además un arnés, que es lo que conecta tu cuerpo a la cuerda.
Ambas cosas las puedes alquilar fácilmente en el rocódromo, donde un monitor te explicará como colocarte correctamente el arnés y cómo conectarlo al sistema de autoseguro de la cuerda.
Es probable que en distintos rincones del rocódromo haya dispensadores de magnesio, un polvo o líquido se aplica en las manos para evitar el sudor y mejorar el agarre en las presas.
¿Es mejor escalar por mi cuenta o apuntarme a un curso de escalada?
Una de las dudas más comunes es si vale la pena apuntarse a un curso de escalada o simplemente ir por tu cuenta. Si bien puedes empezar a escalar en un rocódromo sin problemas y recibir asesoramiento de los monitores, un curso de escalada te ayudará a aprender más rápidamente y de forma segura. Los monitores te enseñarán las técnicas adecuadas, cómo “leer” las rutas y cómo mejorar tus habilidades, todo en un ambiente controlado y divertido.
En los rocódromos de Madrid, encontrarás diversos cursos de iniciación a la escalada que se ajustan a diferentes horarios y niveles. Si eres principiante, un curso te proporcionará las herramientas y conocimientos necesarios para mejorar tu técnica, evitar lesiones y disfrutar más de este deporte. Además, conocerás a otras personas que están en la misma situación que tú, lo que hará que la experiencia sea más divertida y enriquecedora.
¿Todo el mundo puede escalar?
Sí, sin duda. La escalada es un deporte inclusivo que puede ser practicado por personas de todas las edades y niveles de habilidad. Para ello, existen vías y bloques de distinta dificultad en los que puedes ir progresando, desde el más fácil al más complicado. Déjate llevar por el movimiento y busca siempre la forma más fácil de subir y resolver los pasos, ¡verás que es muy intuitivo!
La escalada es una excelente manera de ponerte en forma y mejorar tu resistencia, fuerza, flexibilidad e incluso tu autoestima. Si es tu primera vez, recuerda que todo es cuestión de práctica y paciencia.
Algunos consejos para tu primera vez en un rocódromo:
- Ve con actitud positiva: La escalada puede ser desafiante al principio, pero no te frustres si un movimiento o paso no te sale a la primera. Vuelve a intentarlo; verás que cada intento te ayuda a mejorar.
- Pregunta a los monitores y monitoras: No tengas miedo de pedir ayuda o aclarar dudas. Están allí para guiarte.
- Disfruta del proceso: La escalada es tanto un reto personal como una oportunidad para divertirte y socializar.
Los rocódromos de Madrid ofrecen un entorno seguro y accesible para principiantes, así que no dudes en probarlo, ya sea por tu cuenta o apuntándote en un curso. Recuerda, lo principal que necesitas es motivación, ropa cómoda y algo de equipo básico, que podrás alquilar en el mismo “roco”. ¡La aventura te está esperando!